Un estudio comprueba que la agresividad del perro se debe, en mayor medida, a la conducta del dueño. No obstante, hay razas que conviene no hacerlas enojar 

Hay perros que dada su morfología o carácter físico y temperamental son considerados por algunas legislaciones como perros potencialmente peligrosos (PPP), dado que suponen un verdadero peligro para las personas a la hora de una confrontación. Sin embargo, expertos y estudios científicos y sociales confirman que no existen razas de perros genéticamente agresivas. Un estudio publicado en la revista Applied Animal Behaviour Science asegura que la conducta agresiva del perro se debe en mayor medida a la conducta agresiva del dueño.

Claro que hay perros que suelen ser tratados como “bravos” por su personalidad, perros que suelen ser muy agresivos cuando se enojan o cuidan su espacio.

Aquí algunos de ellos:

Rottweiler

Esta raza de perro es una de la más potente que se conoce. Ninguna otra raza puede igualar su fortaleza ni su presión al morder. Se desarrolló en la ciudad alemana de Rottweil, donde durante siglos realizaban labores de guarda y pastoreo. A comienzos del siglo XIX se encontraba prácticamente extinto, pero gracias a la labor de varias personas la raza se conservó. Más tarde también se usó como perro de trabajo, y desde principios del siglo XX como perro policía.

Pit bull terrier

Se crió como raza de trabajo y pastoreo para las granjas, sin embargo con el tiempo se fueron potenciando sus cualidades para enfocarlos a peleas de perros. También es bueno como perro guardián, perro policía e incluso como perro de caza.

En España, Colombia, Uruguay y Chile deben usar bozal y correa al pasear; si no cumple con estos requerimientos el dueño es multado. En Venezuela, desde del 31 de diciembre de 2014 el tener esta raza pasó a ser completamente ilegal, aunque más tarde, en enero de 2015, fue permitido su tenencia, pero deberán permanecer en cautiverio, sin mencionar que se deben cumplir ciertos parámetros legales.

Staffordshire bull terrier

Fue creado en Inglaterra, en la región de Staffordshire, durante el siglo XIX, donde se utilizaba para peleas de perros. Viene de cruces entre bulldogs y terriers y también se les conoce como “staffie”.

Es un perro muy activo, valiente y obediente, pero necesita firmeza en el adiestramiento, ya que si no se puede convertir en peligroso, sobre todo con otros perros. Tienen un fuerte instinto de liderazgo, y por ello no son muy recomendables para familias, ya que hay que hacerles entender bien que cada miembro de la familia está por encima de él en la manada.

Dóberman pinscher

Nacido en Alemania, el dóberman forma parte de una de las raza de perros leales y brillantes.

Considerados unos de los mejores perros guardianes, suelen aparecer siempre en la puerta de fábricas o lugares grandes donde cuidan con eficacia. Por esta razón, son perros que atacan cuando ven que su territorio o su familia está siendo amenazada.

Pastor alemán

Conocido por pertenecer a las fuerzas policiales y militares alrededor del mundo, es uno de los perros más inteligentes, fieles, adaptables y fáciles de entrenar. Originalmente, eran perros que se encargaban de vigilar y proteger el ganado en Alemania. De esta forma, este perro se convierte en uno de los más peligrosos, no para sus dueños, sino para los intrusos.

Alaskan malamutes

Alaskan malamutes es la raza del perro conocido como “siberiano”. Es la más cercana a los lobos. Son grandes trabajadores, y en ello no darán problema, sin embargo, es difícil pararlos cuando empiezan. Por otra parte, tienen un fuerte sentido de manada, por lo cual es probable que ataquen en un grupo de varios perros de entre 35 y 45 kilos de peso cada uno.