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Jornada de confesiones y hoy habrá alegatos y luego dictarán sentencia

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Jornada de confesiones y hoy habrá alegatos y luego dictarán sentencia
En medio de un fuerte dispositivo de seguridad se realizó ayer la segunda audiencia en la Cámara del Crimen

Cámara del Crimen – Juicio por los atentados a balazos contra el “Trapito” y “Rocky”

Mauro Sandoval admitió haberle disparado a Maximiliano Mercado y desvinculó del hecho a Braian Cáceres y al “Chileno” Darío Ruiz. En tanto, Juan Otín reconoció que baleó al exboxeador Diego Giménez. En definitiva, todos confesaron la mayoría de los delitos y el debate se abrevió

Maximiliano Mercado fue el único testigo de la jornada, ya que horas después los seis acusados confesaron casi todos los hechos que se les atribuyen. Sandoval admitió haberlo baleado, pero desvinculó a Cáceres y a Ruiz

Inesperadamente, el juicio por los intentos de homicidio de Maximiliano “Trapito” Mercado y del exboxeador Diego “Rocky” Giménez entró en la recta final, luego que todos los acusados confesaran los delitos que se les atribuían, con excepción de la presunta participación de dos de ellos en el primero de los hechos.

En efecto, Mauro Leonel Sandoval (23) admitió haberle disparado a Mercado la noche del 9 de febrero de 2016 en inmediaciones del Anfiteatro, pero desvinculó del ataque a su cuñado, Braian Claudio Marcelo Cáceres (21), y a Darío Eloy Ruiz (36), quienes reconocieron otros ilícitos que se les atribuyen.

Lo mismo hizo Juan Javier Otín (39), acusado de haber baleado al expugilista villamariense, y también se declararon culpables Carlos Alberto Otín (33) y Pablo Leonardo Mercado (27), hermanos de Juan y del “Trapito”, respectivamente, con respecto a otros hechos.

Tras las confesiones, el fiscal y los abogados defensores acordaron abreviar la instancia final del proceso, para lo cual decidieron incorporar “por lectura” toda la prueba colectada en el expediente.

 

Ultima audiencia

Por esa razón, el juicio que se sustancia en la Cámara del Crimen local tendrá hoy su tercera y última audiencia. A partir de las 9, jueces y jurados escucharán los alegatos de las partes y en horas de la tarde se conocerá la sentencia.

Con este proceso oral y público, la Justicia procura esclarecer una veintena de hechos que están descriptos en ocho causas conexas, por delitos tales como “homicidio en grado de tentativa” (los atentados contra las vidas de Mercado y Giménez), “abuso de arma”, “amenazas calificadas”, “coacción”, “robo”, “lesiones graves”, “encubrimiento”, etcétera.

Cabe recordar que los seis imputados se encuentran privados de la libertad desde hace más de un año y es un hecho que hoy serán condenados, aunque los montos de las penas dependerán de los pedidos que haga el titular del Ministerio Público a partir de las confesiones de la víspera.

 

La primera parte

En la primera parte de la audiencia y tras la apertura del debate luego de 20 días de receso (el juicio había comenzado el 6 de marzo, pero se suspendió por un problema de salud de uno de los defensores), el fiscal y cada uno de los letrados intervinientes presentaron el caso, tal como lo establece la Ley 9.182 de Jurados Populares de la Provincia de Córdoba.

Luego se le tomó declaración testimonial a Maximiliano Mercado, quien relató cómo sucedieron los hechos aquella noche de febrero de hace dos años, cuando recibió varios impactos de bala que lo dejaron postrado en una silla de ruedas.

Ya en horas de la tarde y luego de un cuarto intermedio de un par de horas, los seis acusados comparecieron en relación a los hechos que se les atribuyen y prácticamente todos se declararon culpables. La excepción se produjo cuando Sandoval se hizo cargo en soledad del ataque al “Trapito” y desvinculó a Cáceres (está acusado de ser coautor) y al “Chileno” Ruiz (sospechado como el instigador).

Durante su declaración, el joven santafesino dijo que le disparó a Maxi porque creyó que se trataba de su hermano Mauricio Mercado, quien a las 17.30 de aquel mismo 9 de febrero de 2016 había efectuado varios disparos contra la vivienda de Braian Cáceres, ubicada en barrio San Nicolás de esta ciudad.

A su turno, tanto Cáceres como Ruiz reconocieron los hechos delictivos que se les endilgan, menos haber participado directa o indirectamente en el ataque al “Trapito”.

Lo mismo hicieron Juan Otín, su hermano Carlos y el hermano de Maxi, Pablo Mercado.

El primero de ellos está acusado de haberle disparado a “Rocky” Giménez la noche del 12 de diciembre de 2016 frente a la casa del exboxeador, en barrio Felipe Botta, luego de una pelea ocurrida horas antes en la plaza Carlos Fernández.

 

Como Capuletos y Montescos, pero del subdesarrollo

La mayoría de los hechos de violencia que tuvieron como protagonistas a los seis acusados están vinculados a una vieja rivalidad entre las familias Mercado y Otín, en lo que aparece como una “disputa territorial” y por el presunto “manejo” del tráfico de drogas en el barrio San Nicolás. A ellos se suman otros familiares de los “actores” principales, como Cáceres, Ruiz y Sandoval. Algo así como una versión devaluada de la trágica ópera lírica “Capuletos y Montescos” que inmortalizaron el compositor Vincenzo Bellini y el poeta y libretista Felice Romani, ambos italianos, en 1830. En tanto, el caso que tuvo como víctima a “Rocky” Giménez es diferente, ya que se produjo como consecuencia de una despareja pelea callejera en la que participaron varios jóvenes en contra de un menor de edad.

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