Inicio Suplementos El Diario Político “Se han perdido los valores, los ideales, hoy hay una dirigencia conservadora”

“Se han perdido los valores, los ideales, hoy hay una dirigencia conservadora”

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“Se han perdido los valores, los ideales, hoy hay una dirigencia conservadora”

Nació en Villa María el 19 de noviembre de 1969. Es contador. Tuvo un paso por la función pública durante el Gobierno municipal de Miguel Angel Veglia en 1997. Mantuvo bajo perfil hasta 2009 que volvió a la actividad partidaria. Presidió la Asamblea contra la Corrupción. Renunció a ese cargo para postularse por la Línea Libertad e Igualdad a la conducción del comité de circuito Villa María

Marcelo BarottoEscribe: Nancy Musa
De nuestra Redacción

Es un apasionado del trabajo. Habla de su profesión con orgullo y está convencido de que con participación y compromiso le puede devolver al país todo lo que le dio. Educado en el seno de una familia de pequeños productores, se siente agradecido por la vida y por tener la oportunidad de estudiar en la Universidad pública. Habla en forma pausada y varía el tono de su voz en algunas respuestas, pero siempre manteniendo equilibrio en el volumen. Espera que los afiliados radicales le den un voto de confianza en las elecciones del 22 de mayo.

¿Cómo fue la decisión a la hora de postularse para presidir el circuito Villa María del radicalismo?

Hace mucho que tengo aspiraciones de conducir la UCR de Villa María, por distintas razones nosotros hicimos un aporte desde lo técnico, pero desde hace un tiempo creo que estamos en condiciones de postularnos. Tenemos la edad, tenemos la sapiencia para poder conducir un radicalismo de Villa María con la aspiración de en 2019 volver al Gobierno local.

Para eso, hemos armado un proyecto que busca volver a poner en valor el comité, queremos trabajar en la conformación de equipos para que en una primera etapa hagan el diagnóstico de todas las variables de la vida social y económica de la ciudad. Y tener una mirada regional porque eso afecta el contexto en el que vivimos.

Queremos sintetizar la voz del afiliado y volcarla en políticas públicas, escuchar al afiliado porque lamentablemente parece que los dirigentes no escucharan a la gente y si no la escuchan no se le puede dar respuestas a sus necesidades.

Tenemos intenciones de traer una escuela de formación política, queremos traer una organización que está dentro del partido que se llama Organización de Trabajadores Radicales (OTR), donde hay dirigentes locales pero van a trabajar a Córdoba.

Ya estamos trabajando en un centro de políticas públicas. El partido debe volver a ocupar el rol que tuvo desde el 83 hasta la década del 90.

 

¿Qué le pasó al radicalismo en los últimos años?

Cayó en una crisis como cayeron todos los partidos políticos a nivel mundial. Los motivos son múltiples, hoy con las redes sociales cualquier ciudadano se enoja y descarga su bronca en Facebook, en Twiter, descarga pero no le da continuidad. También hoy se manejan mucho por encuestas y se posicionan personas que tal vez nunca trabajaron en el campo político, que se destacaron en alguna actividad particular y porque mide bien lo ponemos como candidato.

Y tenés gente que se ha formado en política y lo mandan a ser furgón de cola.

También se han dejado de lado los valores, los ideales por el cual Alem y Don Hipólito en su momento pelearon, ellos le ponían el pecho a las balas en la barricada y hoy de una dirigencia popular y revolucionaria tenemos una dirigencia conservadora. Nos hemos convertido en aquellos a los cuales combatíamos.

Me parece que el radicalismo se debe un debate profundo, hoy los dirigentes salen a la comunidad cuando ven un cargo rentado. Nosotros vamos por un cargo ad honorem, y tenemos que volver a amalgamar a toda esa masa de gente que está enojada.

Y ese trabajo va a llevar tiempo. A mí el tema de la Asamblea (contra la corrupción) me ha permitido hacer un diagnóstico y guste o no la Asamblea vino a ocupar un espacio que habían abandonado los partidos políticos.

La gente necesitaba alguien fuera el receptor de sus críticas, pero estoy convencido de que las verdaderas herramientas de cambio son los partidos políticos.

 

La Asamblea tomó el tema de la corrupción, pero ¿por qué no se avanza en ese punto?

Creo que en el caso de los fiscales hay una falta de acción para investigar el poder público de turno. Ante un hecho o una situación no veo por qué el fiscal no actúa y pareciera como que el político que está en la función es intocable. Y si no veamos lo que ocurre a nivel nacional, después que dejaron el poder recién se despertaron los fiscales. Hay algo que dentro de los principios republicanos no está funcionando como debiera. Me parece que va a llevar tiempo, pero los cambios se van a dar si la sociedad sigue manifestándose, solicitando y exigiendo medidas.

Si esto queda en algo coyuntural, se van a seguir repitiendo los vicios y las formas se van perfeccionando para delinquir en contra del Estado.

 

Van a tener internas en la ciudad, no lograron ponerse de acuerdo en una lista de unidad ¿por qué?

Nosotros armamos un proyecto y lo hemos puesto en consideración, hemos generado las adhesiones, no pasa por un hombre, es un trabajo de equipo. En el caso de la otra lista no conozco los pormenores del proyecto, nos hemos sentado a hablar pero no conozco el proyecto.

Si van 50 afiliados a votar, son ellos los que se van a manifestar y no van a ser dos o tres dirigentes en una mesa los que decidan. Las negociaciones entre dos o tres dirigentes siempre se hacen de acuerdo a sus intereses y no al interés del afiliado.

Estoy convencido que la interna es el ejercicio democrático que tiene un partido, es una herramienta saludable y se va a elegir una conducción con legitimidad.

 

La alianza con el PRO generó una gran polémica dentro del partido.

Lo que se hizo con el PRO fue un acuerdo a nivel nacional y hubo un acuerdo legislativo nosotros somos respetuosos pero nuestro trabajo es territorial.

 

¿Cómo analiza las políticas que está implementando el Gobierno nacional?

El radicalismo hoy tiene un rol importante en el Gobierno nacional, yo siempre entendí que los subsidios distorsionaban la economía y hoy estamos padeciendo eso con los reajustes. Con todos los conflictos que genera una política de shock, como la que se está aplicando para tratar de estabilizar la economía en el mediano plazo.

Uno pretende que sea lo menos traumática posible pero tenemos una realidad que está agravada hoy por el impacto climático, en el caso de nuestra región afecta al sector tambero y allí es donde debería aparecer el Estado para tratar de sostener un sector importante. El tema es que se demoran las medidas y mientras tanto va quedando mucha gente afuera, hay suspensiones, hay despidos, hay gente con una situación financiera muy complicada con todo el derrame que significa ya que afecta a todos. En nuestra región, además de todos los ajustes, tenemos el problema climático y el Estado tendría que aparecer para morigerar la situación grave que se está viviendo.

 

Frente a este escenario ¿qué expectativas tiene?

El país ha tenido un déficit de 25 mil millones de dólares para 2016, el arreglo con los fondos buitre va a permitir acceder a los mercados de crédito para financiarse. El gasto público es enorme, está muy por encima de los parámetros normales y había que recortar en algunas áreas, tema tarifa, la importación de petróleo son cifras siderales, creo que de alguna manera van a tener que tomar medidas de inversión para volver a sustituir la importación por generación alternativa de energía. Esta es una de las causas que desangra la economía.

El tema urgente es controlar la inflación porque hoy estamos con salarios que han surgido de paritarias de un año atrás cuando hubo aumentos de luz, de peaje, etcétera…es imposible que el bosillo pueda llegar. Esperemos que esta situación se arregle lo antes posible porque se va a empezar a sentir el malhumor social. Ya empezaron los conflictos.

 

¿Está de acuerdo con el proyecto de ley antidespido?

Creo que es una medida que al sector empresario lo pone en una situación límite y hay que superar esta coyuntura. No creo que la ley antidespido sea la forma. Son realidades complejas y cada sector tiene situaciones distintas.

 

Desde el Gobierno nacional se habla de la herencia recibida constantemente, pero ¿qué hizo la oposición en los últimos doce años, entre ellos el radicalismo?

La oposición cumplió perfectamente su rol durante el Gobierno de Néstor Kirchner. Ahí fue cuando se sacaron leyes muy importantes, como la composición de la Corte Suprema. Después cuando tuvieron mayoría absoluta, la oposición no tuvo fuerza ni fue escuchada. La democracia funciona bien cuando los poderes están distribuidos en forma equilibrada.

 

Deme su opinión sobre Mauricio Macri como político

(Sonríe) Macri como político es un buen empresario. No sé si se imaginaba, en su fuero íntimo, que iba a ser presidente. Creo que estaba trabajando para posicionar su partido a nivel nacional pero ocurrieron una serie de hechos, de errores del oficialismo, que le permitieron llegar al Gobierno.

El tiene un manejo distinto. Se maneja con un sentido de la eficiencia, como un empresario.

 

¿Y Juan Schiaretti?

Schiaretti viene sosteniendo lo que viene haciendo el peronismo desde 1999. Trata de mantener la identidad de Córdoba, Córdoba trata de ser diferente del resto pero nos ha costado mucho la pelea con el kirchnerismo.

Es una provincia con enormes potenciales, pero esa pelea nos ha retrasado. No es una provincia para tener todos los problemas de infraestructura que tiene, cuando tenés provincias como San Luis que parece otro país.

Cuando tenés recursos naturales, tenés las universidades, una empresa de energía y no hemos explorado el campo de las energías alternativas, entre otras cosas. Córdoba tendría que ser una provincia de punta y ojalá podamos enderezar el barco.

 

Una opinión sobre Martín Gill.

Gill cometió un enorme error político al no poder diferenciarse de (Eduardo) Accastello. Nosotros le pedimos Auditoría el día 11 de diciembre apenas asumió. Me parece que su gestión va a cargar con la mochila de la gestión anterior.

Lo lamento por él, porque pretende dar una imagen de transparencia que en los hechos no se ver reflejada. Además con un Gobierno nacional de otro signo político y sin fondos. Vamos a ver cómo es capaz de administrar sin plata.

 

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